Nutrición

AUTO IMAGEN CORPORAL – ¿COMO ME HABLO?

QUE ES LA AUTO IMAGEN CORPORAL

Todos o casi todos tenemos una parte de nuestro cuerpo que nos gustaría mejorar. Seguramente porque nos comparamos con otras personas y según nuestro criterio, lo de esa persona “esta bien” y lo mio “está mal”.

Cuando adelgace seré feliz ¿lo has pensado alguna vez?

Es lícito querer mejorar determinadas partes de nuestro cuerpo y solemos hacerlo en la medida de nuestras posibilidades: nos teñimos las canas, nos damos crema antiarrugas, usamos productos para la caída del cabello… El problema viene cuando esas partes que no nos gustan las consideramos un defecto tal, que nos frustra y limita nuestra vida, teniendo una mala auto imagen corporal.

Antes de comenzar cualquier proceso de recomposición corporal es muy importante preguntarte por qué lo haces:

AUTO IMAGEN CORPORAL
  • ¿Quieres mejorar tu salud? ¿Quieres mejorar tu aspecto físico?
  • ¿Por qué quieres mejorar tu aspecto físico? ¿Lo haces porque te gustaría verte mejor (totalmente lícito) o lo haces porque piensas que cambiando tu físico vas a ser más feliz?
  • ¿Hasta que no tengas el físico que tienes idealizado en tu cabeza, te hablas mal a ti mismo o limitas exponerte en público porque evitas que otros te miren?

Si te sientes identificado con esto último, es aquí por donde debemos empezar a trabajar y un apoyo fundamental va a ser la terapia psicológica.

COMO ME HABLO

La forma en la que me hablo tiene muchísima repercusión, ya que existen los siguientes riesgos negativos:

  • Aislamiento social: no quiero que me vean mi cuerpo en el gimnasio, en la playa…
  • Hábitos y acciones peligrosas asociadas a conducta alimentaria: vómitos autoinducidos, uso de fármacos, dietas restrictivas…
  • Comparación habitual con otras personas: todos tendemos a compararnos con otra persona que a nuestro parecer tiene unas características físicas que nosotros querríamos tener. Inconscientemente ya pensamos que nosotros tenemos un defecto.
  • Auto-diálogo agresivo: me doy asco, mi cuerpo es horrible, no quiero mirarme…
  • Chequeos contínuos de las zonas que generan mayor incomodidad: es bastante común que nos focalicemos en “los defectos” de nuestro cuerpo olvidándonos de que esas partes cumplen funciones positivas, así como de otras partes de nuestro cuerpo que sí nos gustan.
  • Usar ropa ancha, de talla mayor a la necesaria, colores oscuros, etc. para esconder el cuerpo.

Un diálogo interno negativo, es decir, hablarnos a nosotros mismos/as centrándonos en la insatisfacción con el peso o la grasa corporal tiene efectos negativos para la salud como:

  • Trastornos alimenticios
  • Insatisfacción corporal
  • Comenzar dietas restrictivas
  • Depresión

LA INDUSTRIA DE LA INSATISFACCION SI EXISTE

Tinte para las canas, tratamientos antienvejecimiento, cremas anticelulíticas, batidos, «infusiones adelgazantes»… la lista puede ser interminable.

Nos venden productos para “corregir” cosas que son normales y por lo tanto nosotros las identificamos como defectos. ¿Quizá estamos llamando defectos a lo que es normal?

Vivimos expuestos a un bombardeo constante en redes sociales sobre supuestos ideales de belleza irreales distorsionados por filtros, Photoshop, etc. Nadie se saca una foto para Instagram cuando se ve hinchaz@, o se ve fe@. ¿no crees?

Se acerca el verano, ¡operación bikini, pierde 10 kilos en 2 semanas! ¿te suena? ¿Por qué si peso 10 kilos más no puedo ponerme un bikini e ir a la playa? ¿Tengo que autoaislarme en casa o ponerme ropa ancha y oscura en verano para que no se me vea? Esto es el mensaje que inconscientemente nos envían este tipo de reclamos publicitarios, haciendo que te sientas mal si no haces lo que te dicen. Hay una potente industria que explota la insatisfacción corporal a la que le interesa que no le guste tu cuerpo para venderte sus productos

Pierde peso si es lo que tu realmente quieres, pero desde el cariño, por salud, disfrutando del proceso, de forma coherente y saludable y porque te quieres.

COMO PUEDO MEJORAR MI AUTO IMAGEN CORPORAL

Empieza por estas sencillas preguntas:

  • ¿Cómo es tú relación con tu cuerpo
  • ¿Te miras al espejo?
  • ¿Cuándo / cada cuánto te miras?

Para mejorar la auto imagen corporal hay que reducir los pensamientos alrededor de los aspectos negativos de los mismos, cuando pasas horas y horas pensando sobre un tema, tu cerebro se hace experto en no salir de el y hay que cortar con ese bucle de pensamiento.

Deja de usar palabras como: «tremendo, repugnante, horrible», etc. Desterra frases del tipo «no puedo evitar hablarme así». Se puede evitar y revertir. Prueba a decirte a tí mismo frases como “puedo hacerlo”, «soy capaz», «lo he hecho antes y lo volveré a hacer» y prueba también a hacer diferentes actividades que redirijan el foco de atención hacia:

  • Funciones positivas que desempeña tu cuerpo. ¿recuerdas cuando te rompiste algo o te dolía mucho una parte de tu cuerpo y estuviste un tiempo sin poder utilizarla? Decías: jo, no valoramos cuando estamos bien, no nos damos cuenta de lo que tenemos. Da gracias a tu cuerpo que te permite andar, bailar, abrazar, vivir.
  • Las partes que sí te gustan: seguro que tienes unos ojos muy bonitos o una sonrisa preciosa.
  • Compararse con los demás no es real. La persona con la que te comparas a su vez se compara con otras y entramos todos en una espiral de insatisfacción constante
  • Practicar no juzgarse: No valemos más o menos por el tipo de cuerpo, piel, altura que tengamos y el hecho de creerlo solo nos hace más infelices. Por supuesto hay que comer bien, hacer ejercicio y evitar cierto grado de sobre peso y obesidad para evitar problemas de salud, pero no para conseguir el objetivo “que tenemos en la mente” sin importarnos las consecuencias de conseguirlo.

Cuando consigues liberarte de esa presión, tu mente es mucho más libre.

RECUERDA

  • Es normal sentir cierto grado de insatisfacción con nuestro cuerpo ocasionalmente.
  • Entender nuestro contexto nos ayuda a liberarnos de presiones externas (cambios hormonales debidos a la menstruación o menopausia, problemas digestivos que nos generan hinchazón, estrés, falta de descanso, viajes, vacaciones…)
  • Es interesante aprender herramientas que nos reconcilien con nuestro cuerpo.
  • La terapia psicológica es necesaria para cambiar este auto-diálogo negativo.

En VIPPREST trabajamos siempre desde el autocuidado y el respeto hacia uno mismo. Te hacemos sentir el protagonista de tu cambio, a tu ritmo, sin presiones, trabajando contínuamente la flexibilidad con uno mismo: «me cuido vs me permito». Puedes contactarnos sin compromiso y preguntarnos todas tus dudas en vipprestatusalud@gmail.com

Te esperamos 🙂

Hambre real vs hambre emocional

¿Existen los alimentos contra la ansiedad? ¿Qué puedo comer cuando tengo ansiedad? Bien, tengo que decirte que los alimentos “contra la ansiedad” no existen. En este caso estamos hablando de hambre emocional. Lo que debemos hacer es encontrar la causa de esa ansiedad y aprender a gestionarla. En este caso el profesional que nos va a poder ayudar es un psicólog@.

Cuando decimos que comemos con ansiedad o por ansiedad, lo que estamos haciendo es intentar tapar un sentimiento que consideramos negativo con el placer momentáneo que nos aporta la comida. Por eso elegimos productos o bien muy azucarados o bien muy salados, ya que son los que más placer nos generan.

Pero ¿qué ocurre cuando acabas de comer? No solo vuelve el sentimiento negativo que ya tenías, si no que aparecen nuevos sentimientos como la culpa, la vergüenza o el enfado, por haber comido este alimento.

Quiero explicarte qué diferencia hay entre el hambre real o física y el hambre emocional para que aprendas a diferenciarlas y seas consciente cuando aparece una o la otra.

Hambre física o real:

  • Su función es cubrir nuestras necesidades nutricionales
  • Aparece de forma gradual (con ruidos en el estómago, por ejemplo)
  • Aparece normalmente en los horarios de comida habitual y eres es capaz de posponerla un rato más
  • Te apetecen alimentos naturales y está abierta a varias opciones
  • Se come con control y con consciencia y disfrutas de la comida
  • Te sientes bien cuando acabas de comer
  • Es independiente al estado de ánimo

Hambre emocional:

  • Actúa como un regulador de emociones y su función es aportar confort o alivio momentáneo
  • Aparece de forma repentina y urgente: “necesito comer”
  • Te apetecen alimentos específicos y normalmente no saludables
  • Comes con descontrol y desconexión
  • Sigues comiendo a pesar de estar lleno y no disfrutas de la comida
  • Aunque hay un alivio momentáneo, después se generan emociones desagradables como culpa, vergüenza, tristeza, enfado…
  • Está condicionada por cómo nos sentimos en ese momento

Hambre emocional ¿Cómo podemos gestionarla?

  • Lo primero es aprender a reconocer qué tipo de hambre tengo en ese momento
  • Si es hambre emocional es importante tener otras herramientas para gestionar esa emoción que estás sintiendo: sal a pasear, llama a un amig@, ponte una película, lee, ve a entrenar…encuentra aquellas cosas que te guste hacer y te proporcionen placer.
  • Si un día escoges la herramienta de la comida, no sientas culpa, pero no recurras todos los días a ella, ve alternando aquellas con la que más disfrutes.

Otras notas importantes para gestionar la ansiedad

  • No te prohíbas alimentos, acaba generando deseo y descontrol a largo plazo
  • Date permiso para tomar aquellos alimentos que más te atraen, con atención plena, sin culpa y sin reproches
  • Prémiate y mímate: recibe un masaje, haz algún tipo de actividad física que te guste (yoga, pilates, pasea…), medita, date un baño relajante, ten mucho contacto con la naturaleza, desarrolla tu vena artística…
  • Practica el autocuidado: encuentra aquello que te hace feliz hacer y ¡hazlo mucho!

En nuestras sesiones de nutrición en VIPPREST vemos la necesidad de escucharte y aprender a identificar contigo esos momentos en los que recurres a la comida como refugio de algún sentimiento que consideras negativo. Te damos herramientas para gestionar esos momentos y te acompañamos en la consecución de pequeños objetivos que proponemos de forma conjunta en cada sesión.

Pero recuerda, cuando no somos capaces de gestionar nosotros mismos sentimientos como la ansiedad, tristeza, estrés, depresión… al primer profesional que debemos acudir es a un psicólog@ para aprender a gestionar esas emociones. Para más información, contáctanos sin compromiso en vipprestatusalud@gmail.com

Por qué elegir un nutricionista online

El mundo está evolucionando a pasos agigantados y ahora tenemos la posibilidad de mirar más allá de las dos manzanas alrededor de nuestra casa. Tenemos la posibilidad de contactar con profesionales como un preparador físico o un nutricionista online a los que antes no teníamos acceso y ésta es una oportunidad que debemos aprovechar.

Lo realmente importante

Normalmente nos suele gustar más una consulta presencial simplemente porque el nutricionista nos pesa y nos da datos numéricos que solemos entender que determinan nuestra salud. No digo que no sirva para nada (nosotros también te pediremos que puedas facilitarnos un peso y unas medidas) pero simplemente es un parámetro más de la multitud de ellos que te preguntaremos para saber si estamos consiguiendo nuestro objetivo.

Consideramos mucho más importantes factores como:

  • ¿Notas que la ropa te queda más holgada?
  • ¿Éstás adquiriendo hábitos más saludables?
  • ¿Sientes que te cansas menos en tus actividades diarias como subir escaleras o cargar la compra hasta casa?
  • ¿Tienes menos digestiones pesadas que antes?
  • ¿Estás recuperando la confianza en ti mism@?

Todos ellos son indicadores del estado de nuestra salud y nos indican que estamos en el buen camino en la consecución de nuestro objetivo.

Metodología de un nutricionista online

La metodología de un nutricionista online es igual que la de una nutricionista que pasa consulta de forma presencial. Consiste en realizar una entrevista inicial completa donde recopilamos toda la información posible sobre tus hábitos dietéticos, tu estilo de vida, si realizas actividad física, si padeces o has padecido alguna enfermedad, etc.

Con toda esta información junto con la recopilada por parte de nuestro preparador físico, trabajamos la pauta que mejor se adapte a tus objetivos, a tu estilo de vida y a tus capacidades. El nutricionista online elaborará un plan nutricional personalizado con objetivos y recomendaciones específicas, junto con un asesoramiento y educación nutricional para fomentar tu empoderamiento.  De esta manera, cuando ya no sea necesaria la supervisión continua, serás tú quien diseñe y prepare tu alimentación sobre las bases de la nutrición saludable aprendida y no tengas que acudir nunca más a un nutricionista online.

Un nutricionista online te asesora sobre lo que considera que es mejor en tu caso concreto. No obstante, en ocasiones, a pesar de mantener una entrevista inicial completa y posteriores revisiones periódicas, se pueden escapar detalles e ir surgiendo cuestiones durante el proceso. Por ello es muy importante una comunicación continua y un feedback por tu parte. De esta manera vamos puliendo los detalles hasta dar con la tecla exacta.

La adherencia a un nutricionista online

Nutricionista online

En los últimos años, en el ámbito nutricional-deportivo, se ha escuchado mucho la palabra “Adherencia” y en Vipprest, cuando hablamos de un plan personalizado hablamos precisamente de eso, de generar adherencia al plan, que el plan se adapte a ti y no tú al plan. De no ser así, es cuestión de tiempo que se acabe abandonando.

No queremos que la persona tenga que echar mano cada dos por tres de su motivación personal para continuar con un plan que no le gusta, no se sienta agusto y le cueste llevar a cabo. Esa fuerza de voluntad en la mayoría de ocasiones es muy limitada y “aguantar” meses comiendo de forma restrictiva ni es posible ni es saludable.

Un nutricionista online te ayuda a:

  • Planificar un menú semanal dándote recetas fáciles, rápidas y saludables
  • Leer e interpretar el etiquetado de los alimentos haciendo una compra práctica y saludable
  • Desterrar los diferentes mitos y creencias erróneas sobre la alimentación
  • Detectar el hambre emocional y saber cómo gestionarlo
  • Saber cómo debes alimentarte si tienes alguna intolerancia, alergia o patología concreta
  • Muchas otras necesidades y dificultades que encuentres en tu día a día

Además,

  • Te hace ver que tú eres el protagonista de tu cambio
  • Te asesora, te guía y te acompaña
  • Comprende las dificultades que te surgen durante el cambio y te ayuda a superarlas

Huye del nutricionista online que:

  • Te obliga o te prohíbe comer algún alimento
  • Te regaña cuando “no lo haces bien”
  • Te propone dietas restrictivas
  • Te promete resultados en poco tiempo

Nuestra experiencia nos dice que una sesión con un nutricionista online es igual de efectiva o más que una presencial, ya que los factores a trabajar en cada sesión son la educación nutricional, el acompañamiento y el apoyo continuo con las dudas y dificultades que puedan surgirte en al camino hacia el cambio de hábitos.  Todo ello podemos trabajarlo sin necesidad de que tengas que desplazarte y desde la comodidad de tu hogar.

Solo es necesaria una cosa: que quieras comenzar un cambio por ti. Porque sabes que es lo que realmente necesitas, pero no sabes por dónde empezar, ni si te estás alimentando bien, ni qué ejercicios debes hacer para tus capacidades concretas.  Ahí es donde entra un preparador físico y un nutricionista online.

Estamos totalmente convencidos de nuestra forma de trabajar y que la alimentación sin actividad física no son eficientes la una sin la otra.

Prueba la experiencia de trabajar con un nutricionista online, no vas a perder nada, sin embargo, tienes mucho que ganar.

¿Cuál es mi peso ideal? – Pesocentrismo

¿Qué es el peso ideal?  El peso, es el número que nos da una báscula. Siendo este número la suma total de grasa, músculo, esqueleto, vísceras, agua, etc. Por lo tanto, ¿existe alguna forma sencilla y rápida de saber cuál es mi peso ideal?

¿Cómo puedo calcular mi peso ideal?

Seguro que si te pregunto cuál es tu peso ideal, sabes darme un número aproximado. ¿a qué sí?

Ahora, ¿en base a qué sabes que ese tu peso ideal? ¿Será porque con el peso que has pensado, puedes parecerte más al estereotipo físico que está de moda? Piernas delegadas, abdomen plano, se notan determinados huesos del cuerpo….

¿Crees que eso es saludable? ¿estás pensando en una mejora física o en una mejora para tu salud?

Seguro que has escuchado hablar del famoso Índice de Masa Corporal (IMC) o IBM en inglés.  El IMC es un cálculo matemático que divide tu peso corporal (en kilos) entre tu altura (en metros) al cuadrado:

IMC= peso (kg)/altura2 (m)

  • Si el resultado es < de 18,5: indica infrapeso
  • Entre 18,5 y 24,9: normopeso
  • Entre 25 y 30: sobrepeso
  • Más de 30: obesidad

Es decir, nos dice lo adecuado que es nuestro peso según nuestra altura.

PEEEEEERO, una persona con obesidad y una persona que practica halterofilia que tienen la misma altura, pueden tener el mismo IMC porque los dos pesan lo mismo. ¿crees que es válido calcular solamente el IMC en este caso?

Puede ser un primer valor con el que hacer un cribado, pero no podemos quedarnos ahí. Debemos obtener más parámetros para determinar nuestra salud.

Además, algo importante que tienes que saber, es que aunque seas una persona que esté en normopeso, no tienes que dar por hecho que eres una persona saludable si tu alimentación deja mucho que desear. Hay personas delgadas metabólicamente enfermas (con colesterol, enfermedades cardiovasculares, etc.). Así que aunque ahora mismo tus analíticas estén bien y no tengas sobrepeso, no lo des todo por hecho. CUIDATE, o a largo plazo las consecuencias serán peores.

Relación cintura-cadera

Otro parámetro a medir es la relación cintura-cadera, que nos dará una idea del nivel de adiposidad. Con una cinta métrica (hay cintas especiales para tomar estas medidas), medimos el contorno de la cintura y el de la cadera y hacemos la división: (cm de cintura/cm de cadera)

  • Mujeres: si la diferencia es > 0,82 cm, tendríamos riesgo alto de adiposidad
  • Hombres: si la diferencia es > 1 cm, tendríamos riesgo alto de adiposidad

Con estos dos parámetros podemos tener una idea del grado de nuestra salud en función de la adiposidad.

¡PERO HAY MAS! ¿Realmente existe el peso ideal?

Independientemente de los resultados de los dos parámetros anteriores, debemos hacer siempre una valoración integral. Porque repito, somos personas con nuestra genética y nuestro contexto; no somos lonchas de jamón a las que poder recortar la grasa.

Debemos tener claro que EL PESO IDEAL NO EXISTE o por lo menos, no es un número que aparece en una máquina.

El peso ideal es una situación en la que el cuerpo no tiene que hacer grandes esfuerzos para mantenerse en ese porcentaje de grasa. El que te permite relacionarte de manera correcta con la comida, contigo mismo y con tu entorno.

Si aun sabiendo todo lo anterior, tienes báscula en casa y quieres pesarte, tienes que saber lo siguiente:

Las básculas que tenemos en casa son bastante imprecisas (no son profesionales) y con los golpes que les solemos dar chocando contra ellas suelen descalibrarse, por lo que tampoco debemos tener fe ciega en ellas.

También tienes que saber que el peso varía a lo largo del día. Puede variar incluso más de dos kilos, dependiendo la hora del día que nos pesemos, si he ido al baño o no, si he bebido agua y en el caso de las mujeres, variará en función del momento del ciclo menstrual en el que se encuentren. Por lo que no nos agobiemos.

Lo correcto sería pesarse una vez cada 2 o 3 semanas y siempre en días que sean semejantes. Es decir, no te peses un lunes después de hacer ejercicio y el siguiente lunes después de haber tenido comilona y estar tirado en el sofá. O en el caso de las mujeres, no te peses un día con la regla y otro sin ella.

Ten en cuenta que puedes estar manteniendo el peso pero aumentando el músculo y disminuyendo la grasa. Y que este cambio debe ser CONSECUENCIA DEL CAMBIO DE HÁBITOS.

Otros parámetros importantes para medir el peso ideal:

Otros PARÁMETROS MÁS IMPORTANTES QUE EL PESO para medir tu estado de salud son los siguientes:

  • ¿Siento que tengo mejores digestiones?
  • ¿Duermo mejor?
  • ¿Estoy menos hinchadx?
  • ¿Me queda más floja la ropa?
  • ¿Estoy más vital/menos cansadx?
  • ¿Estoy aprendiendo a cocinar más sano?

Si vas contestando a todas estas preguntas con un SI, vas por buen camino.

Empieza a replantearte todo que has leído para ir cambiando poco a poco el chip.

No es fácil; toda la información tan agresiva que tenemos hoy en día sobre estereotipos nos hace mella, pero nuestra salud es nuestra y de nadie más. Cuida la tuya antes de que sea demasiado tarde.

En caso de necesitar ayuda, no olvides que en VIPPREST ofrecemos servicios de nutrición y entrenamiento personalizados. Contáctanos sin compromiso en vipprestatusalud@gmail.com

¿Te sumas al cambio?

Scroll to top